En Praga hay una aceptación especial por los perros,que viene de muchos años atrás y el resultado de esta convivencia histórica
es lo fácil y bueno del trato y la buena educación, tanto del perro como el dueño. No obstante la administración se ocupa, dado el gran número de perros, en dar
programas de educación canina, de cómo actuar y de sensibilización.
Puedes ver a los perros con sus dueños por todos los sitios,en el transporte público, tiendas e incluso bares. Si vas en bus y el perro es pequeño y puede ir
en una bolsa o en trnsportín, no tendrás problemas.
Hay muchos alojamientos que los admiten y algunos, incluso, les preparan un kit de bienvenida.
Si viajas a Chequia con tu perro, el veterinario deberá expedirte su pasaporte, confirmando la vacunación antirábica con más de un mes y menor de un año. Y por supuesto
la dientificación con el chip. Resumiendo si buscas un país petfriendly, elige la República Checa.